Dicho desarrollo viene enmarcado por una serie de cambios fisiológicos y metabólicos, los cuales permiten el crecimiento de la planta y la diferenciación de sus diversas estructuras, según el momento fenológico en que se encuentre. Estos momentos de cambio suelen ser críticos para la planta en cuanto a su susceptibilidad frente a cualquier tipo de variación en las condiciones óptimas de desarrollo.
Los factores del estrés coinciden con los estadios en que la planta es más sensible por los cambios interiores complejos que padece y que son:
La carencia de algún elemento esencial se manifiesta en diferentes sintomatologías fisiológicas y/o morfológicas según el caso. El llamado estrés carencial muchas veces no viene dado por la presencia insuficiente de un determinado elemento en el suelo, sino porque éste se halle en una forma que la planta no lo pueda absorber.