Félix Soler entró en Bioibérica con el objetivo de desarrollar una nueva división agrícola. Con su experiencia acumulada en varias empresas multinacionales creó y ha logrado formar un equipo de 25 personas transmitiendo unos valores acordes con la filosofía de la empresa y con criterios basados en su propio modelo de hacer y ser: proximidad, optimismo, confianza, positivismo y una gran dosis de humanidad difícil de encontrar en los tiempos actuales.
Dentro y fuera de Bioibérica, todos reconocemos su excelente trayectoria y estamos agradecidos de haber tenido la oportunidad de participar en este proyecto liderado por él. Bioibérica –Fisiología Vegetal– se ha convertido en un departamento clave para el complejo industrial de Bioibérica, porque tiene un amplio portafolio con marcas propias, de consumo directo para los grandes productores españoles y en países o regiones como EE.UU., Latinoamérica, Cuenca Mediterránea y Próximo Oriente. Félix nos comenta, “Uno empieza a pensar en todo el camino recorrido y se sorprende del trabajo realizado. ¡Ha sido un sueño hecho realidad! La gente que forma parte del equipo de Fisiología Vegetal ha trabajado con entusiasmo y con alta motivación. Eso ha supuesto un grado de implicación inusual difícilmente copiable en otras empresas con mayor trayectoria y recursos.”

“Poco a poco, y gracias a todos los que han confiado en nosotros, hemos ido alcanzando un buen reconocimiento en el sector, fruto de un trabajo bien hecho durante todos estos años. Un compromiso estrecho con la distribución y el agricultor ha hecho que los éxitos se hayan compartido y, en gran medida, reinvertido en progresar, mejorar y desarrollar nuevos productos para afrontar nuevos retos. Me agrada profundamente ver todo el trabajo realizado por parte de todos, ¡y el balance no puede ser más positivo! Por otro lado, tenemos la necesidad de mejorar constantemente. Existen problemáticas donde el agricultor demanda productos de mayor eficacia con las máximas garantías de inocuidad para el aplicador y el medioambiente y los mínimos residuos en fruto. También se requieren herramientas y formación para gestionar sus cultivos de forma eficiente y obtener así su beneficio óptimo.”
Todos estos retos dan una larga carrera a la División y plantean desafíos para el nuevo equipo que integrará el Dr. Rafael Piñol.